SAN SALVADOR – El gobierno de El Salvador sostuvo en 2020 negociaciones con las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18 -fracciones Sureños y Revolucionarios- para reducir las cifras de homicidios e «intentó esconder las evidencias», según una investigación publicada este lunes por El Faro.
«El director de Centros Penales ordenó retirar cientos de libros de novedades y computadoras de cárceles de máxima seguridad; y el fiscal , impuesto por la Asamblea oficialista, desmanteló el grupo especial que investigaba estas negociaciones», indica el periódico digital en un largo texto.
La investigación señala que los fiscales encargados de la investigación bautizaron el caso como Catedral e incautaron documentos oficiales de Centros Penales luego de que El Faro publicara, en septiembre de 2020, que el gobierno de Nayib Bukele llevaba un año negociando con la MS13.
Hasta abril de 2021, la Fiscalía, dirigida por Raúl Melara, «llevaba un proceso de investigación criminal contra varios funcionarios del gobierno de Nayib Bukele y durante meses los fiscales intervinieron teléfonos, hicieron seguimientos físicos, se incautaron documentos, tomaron fotografías y entrevistaron testigos», apunta.
Negociación con Barrio 18
En septiembre del año pasado, El Faro publicó una investigación en la que se reveló que el gobierno de Bukele mantenía negociaciones con la pandilla Mara Salvatrucha para reducir las cifras de homicidios desde junio de 2019 y para obtener apoyo electoral en las elecciones de febrero de 2021, en las que el mandatario ganó la Presidencia.
En este nueva investigación, el periódico digital afirma que dichas negociaciones también incluyeron a la pandilla Barrio 18 -fracciones Sureños y Revolucionario- e indica que las pandillas «plantearon una serie de demandas que incluyen mejoras en las condiciones de vida carcelarias y beneficios para sus miembros en libertad».