En este dia especial no se puede evitar mirar las fotografías del Día de Acción de Gracias de 2019, cuando las madres cocinarón ollas de arroz con frijoles para toda la familia completa. Eso fue antes de que nadie escuchara sobre el nuevo coronavirus y antes de que el COVID 19 llegara a nuestras vidas.
Este jueves la familia se alistatara para tener su cena tradicional de pavo, boniato, habichuelas y arroz con frijoles y papas.
“Es un doloroso Acción de Gracias. Uno ni siquiera sabe si debe celebrar”, “Es un tiempo solitario”, aunque la gente está tratando de llevar una vida normal, Todos están celebrando el feriado el jueves en medio de una pandemia que no afloja y que ha causado la muerte de más de un cuarto de millón de personas en Estados Unidos.
Pavos y pasteles seguirán saliendo de los hornos, el fútbol americano seguirá en las pantallas, las familias aún agradecerán y conversarán animadamente sobre política, pero este feriado ha sido alterado grandemente luego de meses llenos de dolor y penurias: muchas celebraciones llevan la carga de la muerte de seres queridos, otras han sido canceladas o reducidas por el miedo al contagio.
Llamadas por Zoom y FaceTime se han vuelto típicas para conectarse con familiares que no quieren viajar. Muchos menos voluntarios están ayudando en las cocinas para pobres o centros comunitarios.
“Los feriados son más duros”, dijo Harriet Krakowsky, una residente de 85 años del Hogar Hebreo en Riverdale, Nueva York, y quien extraña las grandes celebraciones de Acción de Gracias de años previos y que ha perdido a vecinos y amigos en la pandemia. “Yo lloro, pero lo supero. Tenemos que seguir”.
Así que, una semana antes del Dia de Acción de Gracias, armada con bolígrafos de colores y pegatinas de lechuzas con bufandas, se debería escribir notas de gratitud para cada miembro de la familia, como por ejemplo decir “Estamos muy agradecidos que estés en nuestras vidas”, en una tarjeta con un dibujo, “aunque no podamos estar juntos este año para los feriados”.